Nieto de un esclavo, Jackie Robinson nace el 31 de enero de 1919 en Georgia (USA) en el seno de una familia de peones de campo. Siete años después se trasladan a California, en donde no puede escapar al racismo imperante en esa época en los Estados Unidos y empieza a dar muestras de su combatividad antisegregacionista.
Comienza a destacar en varios deportes cuando debe incorporarse al ejército con motivo de la II Guerra Mundial. En su etapa militar protagoniza algunas escenas por defender el color de su piel, como negarse a ocupar la parte trasera de un autobús, por lo que llega a ser procesado aunque finalmente resulta absuelto.
De regreso a casa, recibe una oferta para jugar en un equipo de béisbol de la Negro League, una competición exclusiva para negros.
Más tarde, el presidente de los Brooklyn Dodgers, un equipo de la Liga Profesional, le hace una oferta y le pregunta si va a ser capaz de aguantar los insultos racistas sin entrar en provocaciones.
Robinson firma con el compromiso de no responder a los agravios.