No recuerdo quienes eran los protagonistas, pero sí, la historia de aquel viejo western:
El dueño de un gran rancho, era el heredero de una noble familia con una arraigada tradición familiar que siempre se había basado en los valores de los principios morales.
Sus dominios eran los más extensos, sus tierras las más fértiles y poseía los más abundantes ganados.
Poco a poco su riqueza fue disminuyendo, sus tierras se fueron secando y su ganado disminuía.